Solemos pensar que los perfumes baratos siempre son o de marca desconocida o de marca mala, pero esto no siempre es así. Echando un ojo en las perfumerías que hay en Internet comprobarás que hay muchísimos perfumes de firmas muy prestigiosas accesibles a bolsillos modestos, con unos precios bastante bajos.

Las perfumerías que tienen presencia en Internet a menudo ofertan perfumes de alta calidad haciendo posible el poder llevarlos contigo siempre. Hacen la función de cualquier otro establecimiento habitual a la que pudieras ir a comprar tus perfumes favoritos pero con más ventajas, como que puedes ojear su catálogo cuando desees, sin que tengas que salir de tu casa y sin que te digan a que hora tienes que ir. En estos establecimientos virtuales podrás encontrar las marcas que quieras, desde las que son mundialmente conocidas, como pueden ser Chanel o Cacharel, hasta las que tienen menor fama. Y encima, al contrario de lo que pudieras pensar, los precios son bastante más bajos que en los establecimientos de la calle y podrás encontrar mayor gama de productos, haciendo que siempre puedas elegir el perfume idóneo para ti.

Los establecimientos web de perfumes te dan la ocasión de siempre tener a tu disposición tus perfumes favoritos y no tener que renunciar nunca a ellas, ya que el precio ya será lo de menos. Además, siempre estarás al tanto de todas las novedades que las marcas de perfumes lancen al mercado, con lo que siempre estarás a la moda, y encontrarás consejos muy útiles sobre cómo sacar gran rendimiento a tus perfumes. Así sabrás cuál es la ocasión es perfecta para usarlo, a qué ropa le va mejor, cómo debes aplicarla en tu piel y otros consejos.

Las perfumerías online siempre serán un gran recurso si te gustan mucho los buenos perfumes y fragancias. Sus consejos te serán muy útiles, y siempre irás con perfumes adecuados a todos los eventos y les sabrás sacar todo el partido. Y lo más importante: los perfumes baratos de alta calidad siempre estarán disponibles para ti.

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· ¿Qué son los antioxidantes?

Los antioxidantes son un conjunto de sustancias de diferentes tipos, compuesto por pigmentos naturales, vitaminas, minerales, y distintos tipos de componentes vegetales y enzimáticos, que consiguen bloquear el efecto devastador que los radicales libres causan en nuestro organismo. Y lo consiguen debido a que evitan la oxidación que pueden producir en algunos compuestos químicos de nuestro cuerpo entre otros, y que se da en las reacciones del metabolismo o por factores ajenos, como las radiaciones ionizantes por ejemplo.

En el párrafo anterior se mencionan los radicales libres. ¿Qué son los radicales libres? Son componentes que poseen excesiva carga negativa porque poseen electrones que están libres. Esto les confiere a los radicales libres una enorme reactividad. Entonces, estos compuestos reaccionan con todo aquello que se encuentran, pudiendo causar verdaderos estragos en nuestro organismo. Los radicales libres se encuentran en nuestro cuerpo en mayor o menor cantidad, y están todo el rato intentando "quitar" electrones a aquellas moléculas que son estables (que no tienen exceso de carga o electrones libres), para lograr la estabilidad eléctrica. Su tenacidad para buscar reaccionar puede originar reacciones que provoquen la destrucción de las células, pudiendo hacer daño al ADN y a la mitocondria inclusive.

· ¿Cómo actúan en el organismo los antioxidantes?

Los antioxidantes hacen que el envejecimiento de nuestro organismo se ralentice, porfiando contra la muerte y degeneración de las células del cuerpo que originan los radicales libres. Los radicales libres a los que nos exponemos normalmente no son neutralizados en su totalidad por nuestro cuerpo. Esto nos obliga a tomar antioxidantes de forma abundante en nuestra dieta si queremos neutralizarlos de forma efectiva.

· ¿Qué son los antioxidantes?

Los antioxidantes son un conjunto de sustancias de diferentes tipos, compuesto por pigmentos naturales, vitaminas, minerales, y distintos tipos de componentes vegetales y enzimáticos, que consiguen bloquear el efecto devastador que los radicales libres causan en nuestro organismo. Y lo consiguen debido a que evitan la oxidación que pueden producir en algunos compuestos químicos de nuestro cuerpo entre otros, y que se da en las reacciones del metabolismo o por factores ajenos, como las radiaciones ionizantes por ejemplo.

En el párrafo anterior se mencionan los radicales libres. ¿Qué son los radicales libres? Son componentes que poseen excesiva carga negativa porque poseen electrones que están libres. Esto les confiere a los radicales libres una enorme reactividad. Entonces, estos compuestos reaccionan con todo aquello que se encuentran, pudiendo causar verdaderos estragos en nuestro organismo. Los radicales libres se encuentran en nuestro cuerpo en mayor o menor cantidad, y están todo el rato intentando "quitar" electrones a aquellas moléculas que son estables (que no tienen exceso de carga o electrones libres), para lograr la estabilidad eléctrica. Su tenacidad para buscar reaccionar puede originar reacciones que provoquen la destrucción de las células, pudiendo hacer daño al ADN y a la mitocondria inclusive.

· ¿Cómo actúan en el organismo los antioxidantes?

Los antioxidantes hacen que el envejecimiento de nuestro organismo se ralentice, porfiando contra la muerte y degeneración de las células del cuerpo que originan los radicales libres. Los radicales libres a los que nos exponemos normalmente no son neutralizados en su totalidad por nuestro cuerpo. Esto nos obliga a tomar antioxidantes de forma abundante en nuestra dieta si queremos neutralizarlos de forma efectiva.

El árbol del mangostán (también llamado Mangostán o Garcinia Mangostana Linn) es un vegetal que tiene las hojas coriáceas y es de origen tropical. Podemos encontrarlo en países del sudeste asiático, como son Myanmar, Filipinas, Malasia, Sri Lanka, Tailandia y la India.

El árbol de mangostán crece de forma muy lenta, es bastante recto y tiene situada la corona en la pirámide. Puede alcanzar fácilmente entre los 6 y 25 m de altura, y tiene una madera de color marrón muy oscuro, dando la impresión a veces de ser negra. Su contenido en látex es pobre, así que se ha usado en la construcción de muebles en más de una ocasión.

Las hojas del árbol del mangostán son opuestas y simples, poseyendo un color verde oscuro. Son de tipo coriáceo con forma elíptico-oblonga, y tienen un ápice de forma acuminada bastante característico, que llega a medir de 6 a 12 cm de anchura y de 15 a 25 cm de longitud. Las nuevas hojas del Mangostán tienen un color rosado y poseen color brillante y forma simétrica que hace que sean muy llamativas.

Las flores tienen un tamaño bastante grande, y son muy carnosas, llegando a medir de 4 a 5 cm. En el mismo árbol podemos encontrar flores de sexo "masculino" o "hermafrodita". El crecimiento de estas flores se produce en racimos, que están compuestos por conjuntos de 3 a 9 flores en los pétalos de forma espesa, ovalada y verde. Son de color amarillo / rojo dentro con el contorno rojo. Las anteras de los estambres de muchas de ellas no tienen polen.

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No sabemos de forma exacta el origen del mangostán, pero se cree que su procedencia es de las islas Molucas y de Sundra. Tiempo después la planta fue domesticada en Birmania o Tailandia. En Tailandia se cultivó y se cultiva de manera muy frecuente, donde se llegaron a contar 4000 hectáreas en el año 1965. El mangostán también se puede encontrar en Kampuchea, Vietnam, Malasia y Singapur.

El árbol fue plantado en Ceilán y en la India sobre el 1800 y el 1881 respectivamente. En las Islas Filipinas también es muy conocido en algunas zonas debido a que también lo cultivan. En 1855, en Inglaterra se pudieron ver algunos de éstos árboles en ciertos invernaderos. También nos los podemos encontrar por el África ecuatorial, más concretamente por Zanzíbar, Ghana, Gabón, Liberia o Congo.

A América sólo fueron exportados unos pocos árboles de mangostán en 1903 a Puerto Rico y al canal de Panamá, así como a Jamaica, a la República Dominicana, a las Indias Occidentales y a Cuba. También se pudieron ver estos árboles en Guatemala, Ecuador y Colombia.

En 1935 y en 1942 fue presentado el mangostán en Bahía y en Pará respectivamente (Brasil). En Bahía la cosecha principal suele hacerse durante los meses de marzo y abril, y luego se lleva a cabo otra en agosto. En el municipio de Cardoso, situado en Sao Paulo, fueron plantadas más de 10 hectáreas de extensión de árboles en 1995, y en 2003, en Idaho, más de 180 toneladas de mangostán fueron comercializadas.

Por desgracia el mangostán en España es difícil encontrarlo, debido a que es bastante perecedero, y muere en poco tiempo, y más si no se conserva en las condiciones apropiadas, haciendo bastante complicado su transporte y almacenaje.